jueves, 3 de mayo de 2012

El molino de Candelario.

Ante una visita fállida al Risco del Águila por culpa de la nieve, nos bajamos a Candelario a echarle un tiento al puñado de vías que hay junto al molino.

Todas las vías las hicimos a yo-yo de unos paraboles que hay arriba y a los que se accede andando, pues entre que no teníamos ni idea del grado de las vías y que no tenemos ni idea del equipamiento, solo que parece viejo, no era plan de arriesgarse. 

Comenzamos por las placas y luego pasamos a este espolón majo, que fue la vía que más me gustó a mi.

Álex probando el espolón.



Yo haciendo la secuencia de pasar de los cantitos a la placa.

Probando las vías que se aseguran desde el río. 

En total habrá unas 10 vías, de las que escalamos casi todas menos un par de techos que no fuimos capaces de sacar. El grado de las que hicimos rondará el V, algunas más fáciles y otras más difíciles. 

Cuando ya nos cansamos de escalar, matamos las horas de sol prácticando autorrescate.

Nuestro primer polipasto.

Nota: El sitio es zona de captación de agua para consumo humano (como muy bien indica un cartel que hay allí), así que si vais a escalar, nada de bañarse ni tirar NADA al rio. 

2 comentarios:

  1. Bueno, en realidad NUNCA hay que tirar nada en NINGÚN sitio, no?
    ;D

    ResponderEliminar
  2. jajaja por supuesto!! pero ahí en concreto parece q son bastante meticulosos! estábamos comiendo sentados en el puente y justo llegó un paisano y nos riñó porque podíamos tirar migas al rio, así que si q hay q tener cuidadín! nos has faltado hoy, sonia!

    ResponderEliminar